Hace ya tiempo que los lancers autothysianos, que muestran interés en todo lo que encuentran, empezaron a entrar en Nuevo Edén a través de agujeros de gusano. Los lancers no son agresivos, pero se defenderán cuando los ataquen, además de pedir refuerzos bastante poderosos, que la mayoría de las veces llegarán en forma de un acorazado drifter.
Los drifters se avistaron por primera vez poco después de la llegada de los lancers autothysianos, y desde entonces han salido en su defensa. En Nuevo Edén, se sabe que los drifters solo atacan sin provocación si los pilotos se acercan demasiado a sus agujeros de gusano o a los observatorios jovianos en los que los drifters parecen estar interesados. Sin embargo, una vez que un drifter ataca por cualquier motivo, perseguirá a su objetivo sin descanso a través del sistema y, una vez destruido, se eliminará todo rastro del objetivo, incluidos sus restos y la cápsula del piloto. Si bien los drifters no seguirán a su objetivo a otros sistemas, reanudarán su persecución si este regresa al sistema después de haberlo abandonado.
Recientemente, también se han visto drifters en el espacio de agujeros de gusano, fuera de los sistemas a los que parecen conducir sus agujeros de gusano a Nuevo Edén. Estos drifters son conocidos por atacar al objetivo en cuanto lo ven, sin provocación alguna.