Los contratos de subasta ofrecen objetos para venderlos al mejor postor. Se diferencian de los contratos de intercambio de objetos en los siguientes puntos:
- La puja por el contrato no entregará inmediatamente el objeto, a menos que se haya especificado una compra que se haya aceptado.
- Una vez finalizada la subasta, ni el objeto ni el dinero se entregarán inmediatamente. Tanto el vendedor como el comprador tendrán que reclamar el dinero y el objeto respectivamente para poder completar el contrato de subasta.
- Si la ubicación del contrato se destruye o se desancla, el contrato cambiará de la siguiente manera:
- Si el contrato no se ha finalizado, se cancelará. Los objetos se trasladarán a la seguridad de los bienes del anunciante, a menos que la ubicación sea una estructura en un sistema de agujeros de gusano. Las pujas, si las hubiera, se devolverán a los postores.
- Si el contrato se ha finalizado, pero los objetos o ISK aún no se han reclamado, se reclamarán automáticamente y los objetos se trasladarán a la seguridad de los bienes, a menos que la ubicación sea una estructura en un sistema de agujeros de gusano.
Si el contrato de subasta recibe una puja poco antes de su vencimiento, la subasta se extenderá por algún tiempo para permitir que otros postores reaccionen. Las ofertas adicionales dentro de ese plazo lo extenderán de nuevo.